Los inicios de PPO se remontan a 2011, cuando un grupo de abogados con experiencia internacional decidió retornar a Bolivia para ofrecer al mercado boliviano servicios legales comercialmente amigables con estándares internacionales, un cambio respecto de los servicios brindados por firmas tradicionales y familiares.
Nuestro enfoque fue sencillo: queríamos centrarnos en los clientes, satisfacer sus necesidades y destacar mientras lo hacíamos.
Al hacerlo, queríamos que nuestros clientes sintieran que contaban con un aliado en nuestra firma, un socio estratégico que percibiera sus desafíos como propios. Y que nos esforzaríamos por afrontar esos desafíos comunicando soluciones y estrategias sofisticadas, pero reales, en un lenguaje accesible, con experiencia y sentido empresarial.
Institucionalmente, visualizamos una firma enfocada en reclutar, capacitar y retener a los abogados y profesionales más talentosos de Bolivia para operar mediante una plataforma inclusiva y basada en el mérito, independientemente de género, estatus socioeconómico u origen.
En aquel entonces, nuestros competidores nos consideraban disruptivos y rebeldes por implementar un modelo nuevo y diferente de servicios legales en Bolivia. Sin embargo, el mercado de clientes reaccionó favorablemente, resultando en una extraordinaria disrupción innovadora en el mercado legal, cambiando para siempre la forma en que las firmas y abogados bolivianos se organizan y asesoran a los clientes.
